domingo, 26 de abril de 2015

Hoy me siento terriblemente MAL.
Me siento terriblemente mal porque e tenido que tragarme todas las críticas que hice a Hipólito Mejía cuando por su ambición personal hizo lo impensable para reformar la constitución y poder presentarse como candidato del PRD en las elecciones del 2004.
A Leonel le favoreció el hecho de que no tuvo que reformar la constitución para poder presentarse a la re elección en el 2008 y yo gocé como el que más que el PLD retuviera el poder de las manos del Presidente Leonel Fernández.
Estuve seguro, y así lo defendí siempre, de que estando el PLD en el gobierno nunca se haría una reforma constitucional para favorecer al presidente de turno fuere quien fuere.
Por eso me alegré mucho cuando Leonel, aun con un 74% de aceptación, endosó ese apoyo a su Partido y se dedicó a apoyar a Danilo para que éste lograra ser el Preidente actual. Pero nunca pensé que Danilo Medina Sánchez auparía la reforma constitucional para su propio provecho y por lo que ha pasado me siento TERRIBLEMENTE MAL, MAL MUY MAL.